Encontrando aguas vivas en las frontera: una espiritualidad de acompañamiento
Hna. Norma Pimentel, MJ/Bishop Mark Seitz, DD
Mons. Mark Seitz, D.D., de la Diócesis de El Paso y la Hna. Norma Pimentel M.J., comparten su experiencia de encontrar a Jesucristo y nuevas fuentes de esperanza para la iglesia y el mundo, en su ministerio con los y las migrantes que llegan a la frontera de Estados Unidos. Ambos hablarán de la sorpresa de encontrarse con una nueva perspectiva, que el trabajo al lado de quienes este mundo considera ser pobres, nos enseña cómo querer, esperar y perdonar y cómo encontrar a Dios en las periferias. ¡Y también nos revelarán las cinco cosas que necesitamos saber sobre la frontera y la migración!
Norma Pimentel, hermana de los Misioneros de Jesús, es la Directora Ejecutiva de Caridades Católicas del Valle del Río Grande. Ella supervisa el brazo caritativo de la Diócesis de Brownsville, brindando supervisión de diferentes ministerios y servicios en el Valle del Río Grande a través de asistencia de emergencia, prevención de la falta de vivienda, ayuda en casos de desastre, asesoramiento clínico, atención durante el embarazo, programas de alimentación y el Centro de Respiro Humanitario. El trabajo de la hermana Norma es una respuesta inmediata a las necesidades emergentes en la comunidad. Su labor humanitaria en la frontera entre Estados Unidos y México, supervisando la provisión de un espacio seguro para que los migrantes descansen y recuperen fuerzas, ha sido reconocida por muchas organizaciones en todo el país.Fue incluida en la lista 2020 TIME100 de las personas más influyentes del mundo. Y más recientemente, el Papa Francisco le envió un mensaje en video alentándola a ella y a todos los voluntarios a continuar su trabajo a lo largo de la frontera.
En 2013, el Papa Francisco nombró al obispo Mark Seitz como el sexto obispo de El Paso. Como prelado al servicio de una comunidad fronteriza cuya ciudad hermana es Ciudad Juárez, Chihuahua, el obispo ha centrado su trabajo y su corazón en los pobres y vulnerables, incluidas las familias migrantes y refugiados que han establecido su hogar en esta región o que eligen a la comunidad como su punto de paso. El obispo Seitz cree que los migrantes agregan un valor inestimable a las comunidades donde eligen vivir y que las parroquias y los miembros de la comunidad deben recibirlos con compasión, amor y solidaridad.